El verano es sinónimo de vacaciones, relajo y también, de estar más expuestos al sol, lo que aumenta el riesgo de quemaduras solares e insolación. ¿Por qué ocurre y qué síntomas nos pueden alertar sobre su gravedad? Descubre más y sigue los consejos de nuestros especialistas de Andes Salud, para disfrutar la temporada estival, de forma sana y segura.
Con las altas temperaturas, aumentan las ganas de pasar tiempo al aire libre, disfrutando de la piscina o el mar para refrescarse, y es justamente en esos momentos, en que es necesario extremar los cuidados para prevenir la insolación.
“Los rayos UVB y UVA penetran las capas de la piel, la epidermis y la dermis, lo daños acumulativos en la piel pueden producir a lo largo del tiempo cáncer de piel. Junto con esto, pueden generarse episodios puntuales de insolación, en que, por el nivel de quemaduras, se genera una descompensación como mecanismo de defensa del organismo para combatirlo”, explicó la doctora Gabriela Strauch, dermatóloga de Clínica Andes Salud Puerto Montt.
Considerando que noviembre de 2022 fue el más cálido de los últimos 58 años y que según los pronósticos de la Dirección Metereológica de Chile, este verano llegará con olas de calor intensas y repetitivas, prevenir la insolación es clave para cuidarnos de las consecuencias asociadas.
Una de las principales funciones de la piel, es regular la temperatura corporal a través de sus termorreceptores, terminaciones nerviosas que en conjunto con una región del cerebro llamada hipotálamo, detectan las altas temperaturas y ponen en marcha mecanismos como la transpiración, vasodilatación e hiperventilación para enfrentarlas.
Como señaló la especialista, “en la insolación por radiación ultravioleta, el mecanismo de termorregulación de la piel se daña y el cuerpo no puede enfriarse a sí mismo, lo cual desencadena una serie de síntomas y malestares, que pueden llegar a ser graves”.
Generalmente, la insolación se produce por una exposición prolongada a los rayos del sol y altas temperaturas, sobre todo entre 11:00 a.m. y 16:00 p.m., horario en que la radiación y el calor son más intensos, ya que penetran en forma directa sobre las diferentes capas de la piel.
“Los síntomas comienzan a manifestarse en un par de horas luego de la exposición y se pueden presentar síntomas complejos, por ejemplo, con descamación con una de las capaz o dos capaz de piel”, agrego la doctora Gabriela Strauch.
Sin embargo, en ocasiones, pueden demorar entre uno o dos días en alcanzar su peak y el cuadro completo, puede durar hasta cuatro días”, agregó la doctora.
Dentro de los síntomas característicos asociados a la insolación, se encuentran:
Si bien, la insolación puede afectar a personas de todas las edades, hay que prestar especial atención a grupos de mayor riesgo, como:
En cuanto a los primeros cuidados, es necesario evitar la insolación, con todas las medidas descritas y utilizar protección solar a las 08:00 , 12:00 y 15:00 hrs como norma , aunque este nublado y cada dos horas en caso de baños en piscina o en el lago.
Implementar medidas que ayuden a contrarrestar la intensidad de los síntomas y que eviten que el cuadro de insolación empeore, como por ejemplo:
“Para disfrutar del verano de forma segura, es muy importante que seamos conscientes de que exponerse al sol sin protección, es muy peligroso y además, aumentará los riesgos de insolación, y considerar que las insolaciones tienen más riesgo de tener un melanoma y en el tiempo presentar un pre- cáncer de piel”, enfatizó la especialista.
Entre las formas más simples, pero efectivas, de evitar la insolación y que podemos aplicar durante todo el año, se encuentran:
En Andes Salud, queremos que disfrutes de esta entretenida época del año, cuidándote siempre. Recuerda que ante si tus síntomas de insolación no mejoran, puedes acudir a los Servicios de Urgencia de nuestra red de clínicas Andes Salud. ¡Tu salud es primero!
