¿Sabías que dedicando tan solo 20 minutos al año, la posibilidad de curarte de un cáncer de mama, aumenta a un 95%? En octubre, te contamos sobre la importancia de la detección precoz, los exámenes que debes realizarte anualmente y las señales de tu cuerpo que pueden alertarte hoy.
Como indica el Observatorio Global del Cáncer (OMS), más de 5.000 mujeres chilenas son diagnosticadas de cáncer de mama cada año y dado que esta cifra va en aumento, tomar conciencia sobre la importancia de la detección temprana de la enfermedad, es clave para aumentar las posibilidades de sobrevida.
Según los especialistas de Andes Salud, el cáncer de mama se desarrolla a partir de un crecimiento descontrolado de las células de la glándula mamaria, lo que provoca la formación de tumores que pueden ser localizados o también, extenderse a ganglios linfáticos y otros órganos, como pulmones o huesos.
Según datos aportados en julio de 2020 por la Asociación de Clínicas de Chile y hasta esa fecha, los diagnósticos de cáncer de mama se habían reducido en un 33% producto de la pandemia por COVID-19 y junto a ello, se observó un descenso de un 69% en las mamografías realizadas.
Hoy, luego de más de dos años de pandemia y a pocas semanas de una nueva conmemoración del Día Internacional de la lucha contra el Cáncer de Mama, el próximo 19 de octubre, recordamos que la detección precoz de este tipo de cáncer, puede salvar vidas.
Como ocurre también en otros tipos de cáncer, existen factores que pueden aumentar el riesgo de padecer cáncer de mama y de desarrollarlo en algún momento de la vida. Dentro de los más comunes, podemos mencionar:
En el cáncer de mama, es posible observar y detectar cambios que podrían ser signos de alerta a considerar. Si has notado uno o más de los síntomas mencionados a continuación, debes consultar a un especialista de inmediato:
El doctor Fernando Orellana, cirujano de mama de Clínica Andes Salud Puerto Montt, hizo énfasis en tomar conciencia sobre esta enfermedad. “Se trata de la primera causa de muerte en Chile, por cáncer. Por eso, si eres mujer mayor de 40 años debes realizarte, al menos, una mamografía anual”.
Por otro lado, agregó que “la mamografía ha demostrado la disminución de la mortalidad por cáncer de mama al menos en un 30 por ciento. A ello, hay que sumar la consulta oportuna en caso de aparición de bultos, enrojecimiento de la mama, inversión del pezón o cambio en una de ellas”.
Mamografía y ecotomografía mamaria: dos exámenes fundamentales
La mamografía es una radiografía de la mama, que se toma en dos planos (vertical y oblicuo) y permite observar su interior.
“Los 15 a 20 minutos que dura el examen, pueden salvar su vida y tomar acciones concretas, en caso de que el diagnóstico sea posteriormente confirmado”, agregó el doctor Orellana.
En caso de antecedentes familiares de cáncer de mama, la realización de la mamografía debe comenzar 10 años antes de la edad de diagnóstico del familiar más cercano. Por ejemplo, si una madre fue diagnosticada con cáncer de mama a los 45 años, su hija debe comenzar con una mamografía a los 35 años.
Como mecanismo de detección precoz, los especialistas también pueden recomendar una ecotomografía mamaria, examen complementario que se realiza luego de la mamografía y que ayuda a la caracterización de los nódulos, a detectar aquellos que no son palpables o que tienen un tamaño muy pequeño.
Además, permite diagnosticar otras enfermedades como fibroadenomas, papilomas o mastitis aguda.
Conocer el propio cuerpo es parte fundamental de la detección precoz del cáncer de mama. Junto con la mamografía y ecotomografía mamaria anual, se recomienda realizar una vez al mes el autoexamen de mama.
Repite estos mismos pasos recostada sobre la cama, para una revisión completa.
“Luego de la examinación de las mamas en la consulta, junto con la realización de la mamografía y/o ecotomografía mamaria, realizaremos un análisis de los resultados arrojados y en caso de presencia de un nódulo u otra alteración, haremos una biopsia para confirmar el diagnóstico”, señaló el cirujano de mama.
Con la biopsia, es posible determinar si las células son cancerosas, qué tipo de células están involucradas -pueden ser aquellas en los ductos que drenan leche o en los lobulillos que producen la leche materna- y el grado (etapa) del cáncer.
Además, pueden utilizarse pruebas adicionales para determinar con mayor exactitud las características del cáncer, como por ejemplo:
En cuanto al tratamiento del cáncer de mama, generalmente se realiza una cirugía, que tiene como finalidad, extirpar el tumor y/o los ganglios linfáticos, en caso de que el cáncer se haya extendido a ellos.
La cirugía puede ser parcial, conservando la mama o una mastectomía, en la que se extirpa totalmente, para luego, ser reconstruida.
Después de la cirugía, pueden realizarse radioterapia, para evitar que el cáncer vuelva a aparecer, o quimioterapia, para eliminar células cancerosas que pueden haber migrado a través de la sangre a otras zonas del cuerpo.
